Sábado de Pascua, en mi segundo día de exploración por la ciudad me he topado con decenas de espontáneos con los más variados disfraces de conejo repartiendo huevos de chocolate, también los repartían en las tiendas y en los tranvías, y curiosamente la gente no los cogía a puñados...es que no sabían que eran gratis???!!!. Como era de esperar el tiempo ha puesto poco de su parte, en estos días he visto todo tipo de fenómenos climatológicos (salvo el sol, claro) ha llovido, ha granizado, ha nevado...pero lo peor sin ninguna duda es el viento, en esta tierra llana barre absolutamente todo y se te mete en los huesos. En mi paseo de hoy he encontrado unos cuantos mercados callejeros donde venden multitud de productos comestibles, frescos y coocinados, a un precio bastante razonable; he seguido viendo un montón de tiendas de lo más fashion que despiertan mi espiritu consumista (por otro lado bastante fácil de despertar), hoy he localizado una que vende múltiples cachivaches para cocinar; me he encontrado con varias legiones de turistas españoles; he paseado por el Barrio Rojo, Rosse Buurt en la jerga local, donde varias decenas de ingleses imberbes se dedicaban a insultar a las putas (desde este lado del cristal, los muy valientes) y a hacerles fotos (algo terminantemente prohibido), lo cual cabreaba más a las putas que los insultos; me he encontrado con este curioso modelo de urinario callejero, también conocido como mingitorio, que ilustra este post, que aunque no lo creais es bastante útil en caso de necesidad extrema ya que aquí hay que pagar para mear en esos sitios que los turistas suelen aprovechar para aliviarse (centros comerciales, estaciones...etc), lo que no sé es como se las apañan las señoritas, porque si te agachas se te vé el culo...en fin. En otra de las fotos podeís ver la casa más estrecha de Amsterdam, Singel 7, antiguamente los impuestos se pagaban en función de la longitud de las fachadas, y esta, según cuenta la historia, fue hecha para el sirviente de una pudiente familia que un día dijo a su señor que se conformaría con vivir en una casa tan ancha como la puerta principal de la suya y...dicho y hecho. También hoy os dejo una foto típicamente turística, tulipanes en Bloemenmarkt.
Ya de vuelta a casa y gracias a las averiguaciones de Manolo (el tío), en cuyo honor es la foto de los ricos pastelillos, he logrado entrar en el surinamés de la plaza como si fuera un indígena pidiendo mi ración de Pom, de la cual también acompaño documento gráfico...la verdad es que no está nada mal, es una especie de pastel (de malanga, obviamente) con pollo, especias y con cierto sabor agridulce...tengo que seguir explorando la gastronomía de ese país.
Como bien decía Laurita, el tiempo aquí pasa más despacio pero supongo que antes de darnos cuenta estaremos de vuelta echando de menos nuestros días aquí...curioso ¿no?. Os dejo esta canción que habla un poco de ello y a taparse, que hace un frio ahí fuera...
PD: Besos para todos los que se reunen hoy a disfrutar del cordero pascual, que el fuego y el agua nos purifiquen a todos.
1 comentario:
Hola chico de rayas, ya estamos de vuelta de las "vacaciones" en Los Molinos, todo muy familiar (!tremendo¡).
Ya vemos que en el pais de los infieles no teneis Semana Santa (con sus vacaciones, atascos, etc.), aunque siempre hay enviados de los Tercios para que lo tengas presente.
A falta de torrijas (de lo poco que ha merecido la pena en las vacaciones) veo que has encontrado una buena pasteleria, por lo menos en lo que se ve en la foto. En cuanto al Pom su aspecto no es malo, parece apetitoso.
Respecto al mingitorio y las mujeres, en mis muchos años trabajando en el entorno de la calle de la Montera (que me imagino conoces), he comprobado que determinadas mujeres no tienen ningún problema, se ponen entre dos coches, abren las piernas y "pssssssssss"...... trabajo concluido. No necesitan agacharse, no te imaginas con que facilidad lo hacen.
Bueno por hoy ya está bien, mañana más porque voy a ver a tu amigo y "HEPATOLOGO" Dr. Carreño.
Publicar un comentario