Hoy ha sido el primer día con Bea por estas tierras llanas. El sol ha durado poco, estamos de vuelta al cielo gris y a la lluvia intermitente, eso sí, hay alguna que se resiste a abadonar las sandalias que con tanta ilusión se había lanzado a estrenar ayer.
Hemos decidido ir a pasar el día a Utrecht, allí donde España se dejó varios trozos de su territorio tras la derrota en la Guerra de Sucesión a principios del XVIII. Nos hemos dedicado a patear la ciudad de arriba a abajo todo el día, y lo cierto es que no está nada mal...canales, casas estrechas que parecen venirse abajo, iglesias varias, todo muy limpio y ordenadito...todo bastante parecido al resto de ciudades que conocemos por aquí. Eso sí, podemos añadir una cosa curiosa a nuestra lista de anécdotas; hemos visto hoy, que tras la misa matutina en la catedral la gente se quedaba a tomar un cafelito que amablemente les ofrecía la parroquia...igual Monseñor Rouco debe importar la idea para rellenar un poco los templos, no?. Os dejo alguna foto de la ciudad, a un extraño habitante con el que nos hemos topado en nuestro paseo y el invento más absurdo e inútil del que tengo noticia, un reloj de sol en la fachada de una iglesia...¿aquí?...¿que sol utilizaran para hacerlo funcionar?. También se acompaña este post del testimonio gráfico que confirma la llegada de Penélope.
El padre de Pablo cumple hoy una pila de años y me han llegado rumores que dicen que ha sentado la cabeza...el momento musical del día a su salud, deseándo que el fiestón de ayer fuera todo un éxito. Féliz lunes per tutti y que la semana sea propicia!!!.
No hay comentarios:
Publicar un comentario